La NBA nos ha acostumbrado en los últimos meses a malas noticias en forma de lesiones: primero fue Paul George y en la última semana han caído Kevin Durant y Bradley Beal. De ahí el tremendo susto que se han llevado esta pasada madrugada en Charlotte. Kemba Walker tuvo que abandonar el encuentro que los Hornets disputaban ante los Magic tras un choque de rodillas con el rookie de Orlando Elfrid Payton. En un principio se trata sólo de una contusión, aunque el jugador se someterá a varias pruebas médicas durante el día de hoy para descartar una lesión más grave. "Tengo mucho dolor, pero creo que estoy bien", comentaba el joven base al terminar el partido, en declaraciones que recoge 'ESPN'. "Probablemente tenga que estar unos días fuera, pero es sólo un golpe en la rodilla. Voy a estar bien", finalizó.

Los Hornets vencieron a los Magic por 99 a 97 con 20 puntos de Al Jefferson, que falló 12 tiros de campo. Jannero Pargo aprovechó la ausencia de Walker y se fue hasta los 16, mientras que Michael Kidd-Gilchrist anotó 14. En los Magic, 17 puntos del veterano Ben Gordon y 14 de Payton y Tobias Harris.