La temporada 2014-15 de la NBA comenzó el 28 de octubre y desemboca, 1.305 partidos después, en el Oracle Arena de Oakland donde Golden State Warriors y Cleveland Cavaliers abren esta noche una final de ensueño, la quinta seguida y sexta total para el rey LeBron James ante el nuevo príncipe de la Liga, un Stephen Curry cuyos Warriors parten como favoritos. Las casas de apuestas pagan 1,5 dólares por dólar apostado por el triunfo de los californianos y hasta 2,5 en el caso de los de Ohio. Los análisis estadísticos tampoco dudan: 72% de opciones de ser campeones para los californianos, con un triunfo en cinco partidos (4-1) como opción más probable (24%).

Curry (27 años) nació en Akron (Cleveland), en el mismo centro médico que LeBron (30). Ahora ambos se citan con los Warriors, en su primera final desde 1975, y los Cavaliers, en busca del primer título del deporte profesional para Cleveland desde 1964. No hay ninguna otra ciudad en EE UU que acumule más temporadas de vacío si se suman sus equipos de baloncesto, béisbol, fútbol americano y hockey sobre hielo: 143 por las 107 de San Diego. En toda su carrera, LeBron y Curry­ se han enfrentando siete veces con cinco triunfos para el primero. Pero el genial base de los Warriors quiere sumar el MVP de la final al de la temporada regular, algo que sólo han conseguido en la misma temporada dos guards (bases y escoltas): Magic Johnson­ y Michael Jordan. Además, ha eliminado en las tres rondas anteriores de playoffs a tres jugadores que formaban con él en el Mejor Quinteto de la temporada: Anthony Davis, Marc Gasol y James Harden. El quinto es LeBron. Si Curry también puede con él, será el primero en lograr ese póker.

El balance conjunto de ambos equipos en playoffs es de 24-5, el mejor de dos finalistas desde que Lakers y Bulls firmaron un 22-4 antes de enfrentarse en 1991. Los Warriors han protagonizado una temporada casi perfecta en la que ya suman 79 victorias (79-18 por el 65-31 de los Cavs), cifra que sólo han alcanzado antes de la final once equipos… y todos fueron campeones. Y tendrán factor cancha a favor en un Oracle Arena en el que sólo han perdido tres veces (46-3). Curry suma 73 triples en playoffs, ya quince más que el anterior récord de Reggie Miller. Contra un favoritismo tan claro sólo asoma un antídoto: LeBron James, que llega tras promediar números de Magic Johnson en la final del Este: 30,3 puntos, 11 rebotes y 9,3 asistencias por partido. Su nuevo reto, estos Warriors casi perfectos, hace presagiar una final maravillosa. Hoy arranca.