Kyrie Irving ha sido la última estrella de la NBA en verse sacudida por la mala suerte durante esta temporada. El base de los Cavaliers, que ha sufrido varios problemas físicos en los últimos meses, se fracturó la rótula en el primer encuentro de las Finales ante los Golden State Warriors y estará de baja entre tres y cuatro meses.

El calendario, la carga de partidos, su duración, los métodos de entrenamientos... todo parece estar en entredicho después de un año en el que hasta 26 jugadores que han disputado el All-Star han sufrido algún tipo de lesión de cierta importancia. Una circunstancia única que está metiendo más presión todavía a la NBA para que ofrezca cambios reales en la organización de la Liga Regular.

20 de las 27 estrellas que jugaron en febrero el All-Star de Nueva York han sufrido percances, tal y como recoge el periodista Ben Golliver. 26, si sumamos a los que también participaron en la edición de 2014 y no lo hicieron en esta: Paul George (lesionado en verano, volvió a final de curso), DeMar DeRozan (baja desde noviembre a enero), Joakim Noah (problemas de tobillo en enero), Kevin Love (se perdió los Playoffs por una lesión en el hombro), Dwight Howard (baja de enero a marzo) y Tony Parker (esguince en el tendón a principios de temporada).

De la edición 2015, han sufrido lesiones:

Carmelo Anthony: se operó de sus problemas de rodilla el 19 de febrero. Baja para toda la temporada.

LeBron James: tuvo problemas de rodilla durante todo el 2015. Se perdió diez encuentros entre finales de diciembre y principios de enero.

Pau Gasol: se perdió dos partidos de la serie ante los Cavaliers por una lesión en el tendón.

John Wall: sufrió varias fracturas en su mano y muñeca izquierdas durante la serie ante Atlanta.

Kyle Lowry: fue baja al final de la liga regular (nueve encuentros) por lesiones por desgaste en la espalda y dedos.

Chris Bosh: dado de baja para toda la temporada al sufrir varios coágulos de sangre.

Jimmy Butler: sufrió una lesión en el codo y se perdió tres semanas al final del curso.

Kyrie Irving: lesión de rodilla en los Playoffs.

Kyle Korver: sufrió una lesión de tobillo en la serie ante los Cavaliers. No pudo volver.

Paul Millsap: ausente durante diez días en abril por una lesión en el hombro. En Playoffs estuvo renqueante.

Dwyane Wade: se perdió 20 partidos de liga regular por problemas en la rodilla y los isquiotibiales.

Blake Griffin: se perdio 15 partidos de liga regular por una lesión en el codo.

Kobe Bryant: baja para toda la temporada por una lesión en el hombro.

Anthony Davis: se perdió 14 encuentros por problemas en el hombro.

LaMarcus Aldridge: tuvo problemas en la mano y, aunque en un principio iba a ser baja para toda la temporada, decidió no operarse y jugó infiltrado.

DeMarcus Cousins: sufrió una meningitis al inicio del curso que le mantuvo casi un mes de baja. Después, tuvo problemas en el tobillo al final de la temporada.

Kevin Durant: baja para toda la temporada por fracturas en el pie.

Chris Paul: tuvo problemas en el muslo durante la serie ante los Rockets.

Klay Thompson: sufrió un fuerte golpe en la cabeza durante un encuentro de la serie ante los Rockets. Finalmente no se perdió ningún partido.

Russell Westbrook: pasó por quirófano después de sufrir fracturas en la cara tras un rodillazo de su compañero Roberson. Se perdió varias semanas al inicio de curso.

Además, hay muchos no-allstars 2014 o 2015 que han sufrido lesiones de cierta gravedad: Derrick Rose, Jrue Holiday, Brandon Jennings, Ricky Rubio, Jabari Parker, Nikola Pekovic, Tiago Splitter, Joel Embiid, Lance Stephenson, Anderson Varejao, Rajon Rondo, Chandler Parsons, Patrick Beverley, Mike Conley, Julius Randle, Shabazz Muhammad, José Manuel Calderón, Serge Ibaka, Nerlens Noel, Tony Wroten, Brandon Knight o Darren Collison.