Los Raptors no paran. Sin Jonas Valanciunas (mano) y con DeMarre Carroll aún recuperándose (solo ha jugado 23 partidos esta temporada; se ha perdido los últimos 31), los de Dwane Casey siguen encontrando maneras de ganar partidos. Ayer, contra unos Pacers que venían de batir a los Boston Celtics, la franquicia canadiense se impuso en la prórroga gracias al gran estado de forma de su backcourt All Star y al enorme encuentro que disputó Bismack Biyombo. El center dominó el choque bajo los tableros, capturando hasta 25 rebotes (16 puntos) para superar la mejor marca de la historia de los Raptors (los 24 de Donyell Marshall en 2004). Y el resto del trabajo lo hicieron los de siempre. DeMar DeRozan (28 tantos) y Kyle Lowry (28+8+4) se echaron el equipo a la espalda en ataque y fueron claves en los momentos más importantes. 

Los Raptors (46-21), que van camino de la mejor temporada de su historia (con diferencia), mantienen el pulso con los Cavs al frente de la Conferencia Este (a dos partidos).