El Kalise naufragó con un mal arranque en el último cuarto

eurocup | lietuvos 74 - kalise gran canaria 64

El Kalise naufragó con un mal arranque en el último cuarto

El Kalise se despidió de la Eurocopa de baloncesto al perder en la última jornada del grupo E tras un encuentro que se decidió en el comienzo del último cuarto.

El Kalise Gran Canaria se despidió de la Eurocopa de baloncesto al perder por 74-64 en la última jornada del grupo E ante el Lietuvos Rytas en Vilnius (Lituania), tras un encuentro que se decidió en el comienzo del último cuarto.

En las tres primeras mangas la iniciativa y el mando fue compartido, con ventajas de hasta cinco puntos para unos y otros, pero, tras el empate a 50 puntos, en el minuto 29, el Gran Canaria encajó un parcial 16-2 que sentenció el choque. Antes, el conjunto que entrena Salva Maldonado se mostró combativo, especialmente en el comienzo del envite y bajo el liderazgo del escolta canadiense Carl English, máximo anotador amarillo al descanso con diez puntos.

Los tres primeros minutos fueron de color amarillo (8-9), pero los pupilos de Rimas Kurtinaitis avisaron de sus intenciones con una mayor agresividad atrás y una mejor ofensiva (23-17). El Gran Canaria se mostró trabajador y ambicioso en el segundo cuarto, en el que llegó a firmar un parcial 0-9 para cuestionar unos pronósticos favorables a los anfitriones, y dispuso de un esperanzador 31-36.

Tras el descanso, los lituanos volvieron a la carga con una mayor intensidad defensiva y mejores porcentajes en el tiro para, con un parcial 11-3 (47-44), ilusionar con la clasificación a sus incondicionales. El Kalise únicamente mantuvo la cohesión hasta el referido empate a 50 y, a partir de ahí, sufrió una inexplicable pájara durante los cuatro minutos del inicio del último cuarto, en los que, sin anotar, encajó trece puntos (68-52).

Con todo perdido, el equipo español se quitó la presión, liberó la muñeca y llevó el nerviosismo al Lietuvos Rytas, sobre todo cuando se colocó a sólo cuatro puntos a falta de poco más de un minuto y tras triple del australiano Daniel Kickert (68-64). Sin embargo, la remontada amarilla no llegó a cristalizar y los lituanos se aprovecharon de la ansiedad de su rival para sentenciar ante el júbilo de su numerosa parroquia (74-64).