Mañana viene un inquietante Celtics-Lakers en Boston. Y, cuando todo situaba a los Lakers como un 'Titanic' rumbo a una colisión mortal con el coloso bostoniano, he aquí que el curso de colisión se va alterando: los Lakers reaccionan... y los Celtics se tambalean. Los Lakers vencieron en Memphis por 84-93 , evitando su tercera derrota de la temporada ante los Grizzlies... y los Celtics cayeron por 94-89 en Charlotte , lo que deja su liderato del Este (38-13) en mínima diferencia ante la carga de Miami Heat (37-14).
En el FedEx Forum de Memphis, los Lakers ganaban su segundo partido consecutivo en una gira de siete. "No vamos a hacer de Pau Gasol un Kevin Garnett, alguien que dé golpes bajos a la gente. Pau es quien es. Lo que yo quiero es que coja siempre el primer rebote, que asegure el balón en cada situación dura", dijo Phil Jackson antes de jugar. Dicho y hecho. Cara a cara con su hermano Marc desde el mismísimo salto inicial (Gasol vs. Gasol), el 'All Star' Pau jugó a tope de determinación. Sumó 17 puntos y nueve rebotes, Marc le hizo falta en un intento de tres (primer cuarto)... y un tiro limpio de Pau sobre el mismo Marc (10 puntos, 12 rebotes) selló el 78-91 que valía la sentencia a 2:19. Los Grizzlies se habían acercado hasta 76-78, a 7:00 del final... pero los Lakers respondieron con un parcial justiciero de 0-11, que incluyó triples de Odom y Artest. Precisamente Artest miró con cara de lobo a Marc Gasol después de que Marc golpeara a 'Ron Ron' en la nariz, a 28 segundos del final del tercer cuarto. Sangrando por la nariz, Artest se fue a arrodillarse (para no explotar) a la otra punta del campo. Kobe Bryant y los dos hermanos Gasol hablaron a Artest, que después juntó los puños con Marc en típico gesto NBA de compañerismo. "No me opongo a que Ron golpee a alguien de vez en cuando, pero no quiero que le zumbe precisamente al hermano de Pau". Palabra de Kobe Bryant...
Todos los titulares de los Lakers anotaron 10 o más puntos (más 15 de Odom, reserva), con Fisher en su partido consecutivo número 465 (la racha más larga en la NBA) y Kobe en 19 puntos, siete rebotes y seis asistencias. Las rachas de pérdidas de balón (14, Lakers; 15, Memphis) marcaron el juego. La estrategia zonal de Phil Jackson encerró a Zach Randolph en una tela de araña y condenó a una noche de perros al máximo anotador de los Grizzlies, que acaban de refichar al pintoresco base Jason Williams. Randolph cerró con ocho puntos... y 2/14 en tiros. Sam Young (22 puntos) y Rudy Gay (18) lideraron a Memphis. "Pero no jugamos con la desesperación que lo hicieron los Lakers", aseguró Gay. "Hicimos un buen trabajo de contestar cada tiro, poner un cuerpo delante de otro, no permitir tiros sin oposición", razonó Pau Gasol.
Casi a la misma hora, los Celtics caían en Charlotte, bronco partido que registró cinco técnicas, con dos (expulsión incluida) para el levantisco 'bobcat' Stephen Jackson, despedido por protestar al árbitro Mark Ayotte en el segundo cuarto. Pronto cayeron técnicas para Kwame Brown, Kendrick Perkins y, por supuesto, Kevin Garnett. Los Celtics sólo vistieron a diez jugadores. Tienen fuera de combate a Marquis Daniels (lesión vertebral), Shaquille y Jermaine O'Neal, Erden y Delonte West. Tuvieron que llamar a Avery Bradley, del filial, de North Dakota. Gerald Wallace (19 puntos, 16 rebotes) tomó el mando de los Bobcats tras la expulsión de Jackson, escoltado por Shaun Livingston (18 puntos). Garnett asestó un codazo intencionado a Eduardo Najera... que replicó verbalmente ("Mi abuela pega más fuerte")... y con un triple que valía el 89-83 a 1:57. "No creo que haya anotado un triple en todo el año", dijo Garnett (nueve puntos, 14 rebotes). Pues no: era el sexto triple de Najera en esta temporada. 25 puntos de Allen y 22 de Pierce no salvaron a los Celtics, sumergidos por la marea emocional de los Bobcats. "Cuando expulsaron a Stephen, el resto del equipo dio un paso adelante; es una victoria maravillosa y les felicito", analizó Paul Silas, entrenador de los Bobcats de Jordan, donde Charles Oakley, como asistente especialista en hombres altos, está haciendo horas extras de aprendizaje con Kwame Brown.
En Portland, Rudy Fernández registró el 'highlight' de la noche, una asistencia a Wesley Matthews, en tirabuzón y mirando al tendido, para empatar a 50 justo antes del descanso. Al fin, Rudy, cada día más adaptado a los Blazers de Nate McMillan, anotó 18 puntos (2/3 en triples, 8/9 en libres) en 34:17 de acción. Y ante 20.534 frenéticos espectadores en el Rose Garden, los Blazers frenaron a los Bulls: 109-103 . Sí que fue el 'Jardín' de Derrick Rose, que ofreció a los Bulls 36 puntos y seis asistencias. Pero la flor de Rose quedó segada por dos 'blazers' sin piedad, buenos amigos del volátil Rudy: Lamarcus Aldridge se disparó a 42 puntos, la plusmarca de su carrera (15/23 en tiros), más ocho rebotes. Y Andre Miller se despachó con 27 y 11 asistencias. Portland abre una pequeña brecha con Memphis en el último puesto de playoffs del Oeste.
En Dallas, Cleveland caía a su derrota consecutiva número 25, pulverizando cualquier récord negativo. Con el ajustado 99-96 final, los Mavericks, segundos del Oeste, suman nueve victorias seguidas: todos los partidos desde que reapareció Dirk Nowitzki, autor de 12 puntos. Los Mavs, que fallaron sus ocho primeros tiros, hicieron titular a Peja Stojakovic (ocho puntos, cinco rebotes). Jason Terry anotó 23 puntos. Los Cavaliers no pudieron evitar una muesca más de humillación, ni por las malas: Sessions mandó a DeStevenson al vestuario, en un bloqueo rocoso, Ryan Hollins cogió por el cuello a Chandler. Nowitzki, harto, golpeó intencionadamente a Hickson (26 puntos). Anthony Parker falló un tiro claro que forzaba la prórroga. Y Christian Eyenga (15 puntos) se consolida como titular de los infortunados Cavaliers. "Todos sabemos que ya estamos en los libros de récords y nadie quiere formar parte de esa historia, pero no se puede dar marcha atrás", se lamentó Antawn Jamison.
En Nueva Orleáns, el desgaste emocional ante los Lakers pasó factura a los Hornets, que se inclinaron por 92-104 ante los Timberwolves, con seis hombres en 11 o más puntos... y 27 puntos con 17 rebotes para Kevin Love. 17 puntos y 13 asistencias de Chris Paul fueron inútiles: los Hornets, exhaustos, ya perdían por 46-60 en el descanso. En Denver, Melo Anthony (16/24 en tiros, 16/18 desde la personal) igualó la anotación más alta de su carrera, con 50 puntos a los Rockets. Pero los Nuggets estaban sin Nené Hilario (gripe) y se quedaron sin Billups (tobillo) en el segundo cuarto. Además, Ty Lawson estaba medio cojo. Balance: 103-108 para Houston Rockets con 37 puntos de Kevin Martin y 25 (más ocho rebotes) de Scola. En Sacramento, Utah Jazz arrancó un duro triunfo, 104-107, con 23 puntos de Al Jefferson y 21 de Deron Williams. Los Jazz decidieron en el último cuarto: 17-27, pese a 25 puntos de Cousins y 21 de Evans para los Kings. Al fin, en Oakland, la inteligencia de Steve Nash (14 puntos, 15 asistencias), guió a los Suns para dominar a los Warriors: 92-104, con 19 puntos y 11 rebotes de Channing Frye. Esta vez, Monta Ellis y Stephen Curry estuvieron espesos: agruparon 36 puntos (21+15), pero tirando bastante mal, un 12/34 combinado entre ambos. Y ya, casi todos miran a Boston.
