1. MIKE D’ANTONI (HOUSTON ROCKETS, 18 victorias, 7 derrotas)

Los Rockets parecían en el acantilado después de que el proyecto Morey no encontrara la tercera estrella que acompañara a un Dwight Howard que se fue y a un James Harden al que consumió la apatía la temporada pasada. Apostar por Mike D’Antoni y más jugadores de cuestionable ADN defensivo parecía un suicidio… pero poco a poco se ha ido convirtiendo en la gran historia del primer cuarto de temporada en la NBA. Cuando parecía en una cuesta abajo imparable, D’Antoni está demostrando de nuevo que con los mimbres adecuados puede hacer que un equipo haga click. Y está haciéndonos recordar su enorme trascendencia en la historia reciente de la NBA con los Suns del Seven Seconds Or Less. D’Antoni se puede apuntar la reconversión oficial a base de Harden y la optimización de un roster que ahora mismo parece capaz de pelear por ser top-3 en el Oeste. Y con el que se disfruta cada noche.

2. DAVID FIZDALE (MEMPHIS GRIZZLIES, 17-9)

De ser la eterna presencia junto a Spoelstra en los Heat del big-three a liderar una reconversión complicada en Memphis, donde la veteranía de Zach Randolph y Tony Allen apuntaba hacia el final de la era del grit and grind. Llegó Chandler Parsons y se sugirió un baloncesto más abierto y ofensivo. Desde entonces Parsons casi no ha podido jugar (y no pinta bien…), Conley ha sufrido una lesión seria y Randolph se ausentó siete partidos por el fallecimiento de su madre. Y los Grizzlies no han dejado de competir y ganar, con su instinto de sus últimos años, la mejor eficiencia defensiva de la NBA y la suficiente chispa regeneradora en ataque, con el mejor Marc Gasol de siempre a la cabeza. Eso es mano de gran entrenador.

3. DWANE CASEY (TORONTO RAPTORS, 17-7)

Como no han acometido grandes cambios y no da la sensación de que puedan derrocar a los Cavaliers llegado el momento (todavía lejano, sí, pero…) quizá no se está hablando lo suficiente del excelente equipo que son estos Raptors que no pierden casi ningún partido que no deberían perder y que tienen ahora mismo un histórico 114,9 en rating ofensivo, el mejor de la NBA por delante de los mismísimos Warriors (113,9). Y todo sin Jared Sullinger, su apuesta para el tradicional agujero en el puesto de cuatro, inventando soluciones en la rotación interior y gestionando los tiempos de forma de Lowry y DeRozan. Falta el salto definitivo pero el trabajo de Casey vuelve a ser intachable.

4. STEVE CLIFFORD (CHARLOTTE HORNETS, 14-11)

Otro caso al que se presta poca atención porque ni él ni su equipo son especialmente mediáticos. Pero Clifford vuelve a tener a los Hornets con los playoffs como suelo a pesar de los vaivenes del Este y de algunas salidas que parecían problemáticas para la rotación. Con la mejor versión de Kemba Walker, una defensa de garantías y un ataque que comete muy pocos errores, los Hornets no tienen un margen de crecimiento sideral pero son una constante en el Este gracias, sobre todo, al trabajo de Clifford y su núcleo duro de jugadores.

5. TYRONN LUE (CLEVELAND CAVALIERS, 18-5)

Con el chute de endorfinas de las Finales 2016 todavía en eclosión, los Cavaliers comenzaron la temporada como un tiro y se relajaron después, sobre todo en defensa. Pero están en su mejor versión de siempre en Regular Season, parecen la apuesta más segura para repetir Finales por tercer año consecutivo (medidos Este y Oeste, diría), tienen al mejor Kevin Love que ha visto Ohio y una versión suprema de LeBron James, que sin forzar la máquina sin no hace verdadera falta maneja en formato autogestión sus minutos y esfuerzos. Lue ha creado un clima de confianza y felicidad que condujo al primer anillo tras corregir sobre la marcha las tensiones de la era Blatt y que se ha trasladado intacto a la primera temporada post anillo. De momento, la resaca es dulce en Cleveland.

6. STAN VAN GUNDY (DETROIT PISTONS, 13-13)

Los Pistons tenían la misión de mantenerse en la órbita de los playoffs durante las semanas de baja de Reggie Jackson. Y lo han conseguido. Desde su llegada a la MoTown, Van Gundy no ha parado de tomar decisiones positivas, como entrenador y como directivo. Maneja un bloque joven, que se adapta a su filosofía como un guante y cuya competitividad tendría que ir en aumento a medida que pasen las semanas. Solo algunas derrotas incomprensibles contra equipos de la parte baja de la liga estropean, por ahora, la temporada de Van Gundy y sus Pistons.

7. STEVE KERR (GOLDEN STATE WARRIORS, 22-4)

Los Warriors han perdido tres partidos más que la temporada pasada a estas alturas (la comparación era insoportable, claro) y se les detecta posibles problemas que podrían ser cruciales si acabamos en un Warriors-Cavaliers, chapter III. Pero también les hemos visto ya en versión prodigiosa con su quinteto de la muerte quintaesenciado con Kevin Durant a bordo. Y la integración de este ha resultado suave y por ahora sin problemas para (como se llegó a sospechar) Klay Thompson o Draymond Green. Ahí hay tarea de entrenador en un equipo del que intuimos que, con sus cosas, puede acabar cogiendo en algún punto un vuelo irresistible para todos los demás.

8. JEFF HORNACEK (NEW YORK KNICKS, 14-11)

Finalmente (y logicamente), era tan sencillo como que los Knicks necesitaban un entrenador y no un replicante del triángulo ofensivo. La llegada de Hornacek sonaba a perestroika, movimiento aperturista de Phil Jackson. Y después de un inicio dubitativo, los Knicks están compitiendo, repartiendo bien los roles en función del momento de carrera de cada jugador y con la suficiente química como para volver a ser relevantes en el Este. Buenas noticias.

9. GREGG POPOVICH (SAN ANTONIO SPURS, 19-5)

Los actuales Spurs no son, o quizá sea cuestión de gustos, especialmente divertidos. Y enseñan problemas que pueden ser capitales cuando lleguen los playoffs. Pero han comenzado la era post Duncan, un trance durísimo, en 19-5. Cualquiera lo habría firmado. Y Popovich es el responsable de que, al menos por ahora en Regular Season, haya momentos en los que parece que las cosas no han cambiado demasiado. Parece…

10. LUKE WALTON (LOS ANGELES LAKERS, 10-17)

La primera temporada sin Kobe Bryant, la primera con Luke Walton, la primera del futuro… y ahora siete derrotas seguidas que hacen legítimo que se cuestione la presencia de Walton en esta lista. Pero el entrenador más joven de la NBA está aplicando un cambio de mentalidad que parece, no era difícil de ver, exactamente lo que necesitaba el talento joven que aglutinan los Lakers, y desde luego lo que necesitaba una franquicia que olía peligrosamente a naftalina. Hay que ver cómo resuelve el actual picado del equipo pero por ahora es difícil cuestionar que Luke Walton es la mejor noticia para los Lakers en mucho, muchísimo tiempo.

Otros entrenadores que han sido considerados: Jason Kidd (Milwaukee Bucks), Quin Snyder (Utah Jazz), Billy Donovan (Oklahoma City Thunder), Kenny Atkinson (Brooklyn Nets).