Noche tras noche, Pau Gasol no deja de sorprender a propios y extraños. Su increíble rendimiento le ha llevado a ocupar, en este momento, los puestos de honor en varias de las clasificaciones estadísticas de la Liga. A saber, es segundo en tapones con 2,4 (sólo superado por Anthony Davis), quinto máximo reboteador (11,2 capturas de media) y séptimo jugador en eficiencia con 23,8 puntos: jugadores como su hermano Marc, Tim Duncan, Blake Griffin o John Wall están por detrás de él en este apartado. Además, su nombre también aparece entre los 30 primeros en puntos por partido (26º con 18,0) y minutos jugados (21º con 35,1).

A principios de temporada, muchos teníamos sobre cómo acabaría resultando su adaptación en el exigente sistema de un técnico tan meticuloso como Tom Thibodeau. Aquellas dudas ya forman parte del pasado. Su nuevo entrenador no se cansa de elogiar a su pupilo. Cada vez que puede le propina una buena ración de alabanzas en rueda de prensa. Por eso, tras su espectacular encuentro de esta última madrugada ante los Celtics, el head coach de los Bulls no dudó en calificarle de "increíble". "Lo vemos noche tras noche, todas las cosas que hace en ambos lados de la cancha. La forma en la que juega da al equipo mucha confianza", analiza el ayudante el pasado verano en la selección de Estados Unidos que consiguió el oro mundialista en España.

"El mejor liderazgo se ve en lo que hace cada uno cada día. Hacer las cosas correctamente, ese es el mejor ejemplo del compromiso y sacrificio necesarios con el equipo para ganar. Y Pau lo hace todo el tiempo. Sus acciones hablan más alto que cualquier palabra que se pueda decir. Sabe perfectamente lo que hay que hacer para ganar un campeonato", se explaya Thibs.

Pero los elogios no acaban aquí. Sus compañeros también le dedicaron buenas palabras tras la victoria de los de Illinois en la prórroga. "Tanto ofensiva como defensivamente, ha estado a un nível sensacional todo lo que llevámos de año. Es una de las grandes voces del vestuario. Es enorme tener a alguien como él", comenta nada más y nada menos que el MVP de la NBA en 2011, Derrick Rose. "Está jugando un gran baloncesto. Ha añadido una muy diferente, única y positiva dimensión a nuestro equipo", prosigue un all star como el francés Joakim Noah.

Mientras tanto, Gasol sueña con seguir a este buen nivel físco por el que atraviesa. "Hacía mucho que no taponaba tantos tiros como ahora (lleva 14 en los dos últimos partidos). Espero seguir así", expone. Y cuando le preguntan acerca de si estos Bulls tiene opciones reales de conseguir el anillo allá por el mes de junio es claro y contundente: "Este equipo tiene el potencial para ganar el título y es por lo que estamos trabajando. Viene aquí para eso, no por ninguna otra razón".

Mirotic, en línea ascendente. Por su parte, Nikola Mirotic fue el elegido para suplir en el quinteto inicial a un Mike Dunleavy que hasta anoche no conocía lo que era perderse un partido como bull. En su primera titularidad en la NBA, el ex del Madrid actuó como alero, una posición en la que Thibodeau ya le ha venido probando en los últimos partidos. "Globalmente, lo hizo muy, muy bien. No lanzó bien a canasta, pero realizó muchas y buenas jugadas. Ocupó bien el espacio", destacó el técnico a la hora de calificar su actuación. En la prensa local, también vieron con bueno ojos su labor, recalcando su contribución defensiva: Jeff Green, el mejor celtic en anotación, se quedó en 11 tantos y con un pobre 4/18 en tiros de campo. Como aparecería en las calificaciones de Primari, Mirotic progresa adecuadamente.