Desde que el jugador de los San Francisco 49ers de la NFL Colin Kaepernick abriera la veda de las protestas contra las injusticias raciales y la violencia policial en los Estados Unidos, se han sucedido las muestras de apoyo y solidaridad en el mundo del deporte de todo el país. La NBA no se ha quedado al margen y ayer, en el partido de pretemporada entre los Lakers y los Nuggets, en el Staples Center de Los Ángeles, los componentes de ambos equipos, incluidos los españoles José Manuel Calderón y Juancho Hernangómez, entrelazaron sus brazos, juntos, mientras sonaba el himno nacional.

Los propios Lakers ya habían hecho esto en su primer partido de preparación, al igual de los Rockets y otros equipos de la Liga estadounidense. Se trata de una práctica que se ha extendido en todo el país, como una alternativa respetuosa con los símbolos nacionales, en contraposición a las protestas del propio Kaepernick, que se negó a escuchar el himno de pie, u otros deportistas, que se arrodillan durante su interpretación. Aunque no se trata de criticar esas actitudes, sino de expresar el rechazo a esas injusticias de otra forma.

La NBA y el sindicato de jugadores mantienen conversaciones para estudiar formas de apoyar estas reivindicaciones y la franquicia de los Lakers ya dijo que respetaría las acciones de sus jugadores "para ejercer su libertad de expresión".

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